Ritual para alejar una persona de mi casa

¿Alguna vez has sentido que la energía de alguien en tu hogar es tóxica o drena tu paz? Como alguien que ha lidiado con roommates difíciles y familiares intrusivos, sé lo agotador que puede ser compartir tu espacio sagrado con personas que no están en sintonía con tu vibra.

Durante años, permití que otros dictaran la atmósfera de mi hogar, dejándome sintiéndome impotente y resentida en mi propio espacio. Fue sólo cuando comencé a explorar el poder de los rituales y la magia del hogar que finalmente pude reclamar mi santuario interno.

Hoy quiero compartir contigo un sencillo pero poderoso ritual que me ha ayudado a alejar energías no deseadas de mi casa y atraer compañeros de cuarto más compatibles. Usando hierbas, velas y el poder de la intención, este ritual te ayudará a limpiar tu hogar de influencias negativas y establecer límites energéticos claros.

Preparando tu espacio sagrado

Antes de comenzar el ritual, es importante limpiar y purificar tu espacio físicamente. Haz una limpieza profunda, abre las ventanas para dejar entrar aire fresco y quizás quema un poco de salvia o palo santo para despejar cualquier energía estancada.

A medida que limpias, establece la intención de que estás haciendo espacio para una energía más positiva y armoniosa en tu hogar. Visualízate a ti y a tu espacio rodeados de una brillante luz blanca protectora. Esta práctica por sí sola puede comenzar a transformar la vibra de tu casa.

Reuniendo tus herramientas mágicas

Para este ritual, necesitarás:

• Una vela negra (para absorber energía negativa)
• Una vela blanca (para atraer energía positiva)
• Ramitas de romero (para protección y purificación)
• Aceite esencial de limón (para cortar lazos y energía negativa)
• Papel y bolígrafo

Elige un momento en el que tengas algo de privacidad y no serás interrumpida. Idealmente, realiza el ritual durante una luna menguante, cuando las energías son favorables para soltar y liberar.

Realizando el ritual

1. En un espacio tranquilo de tu casa, preferiblemente cerca de la entrada principal, coloca las velas negra y blanca en un candelabro o plato seguro. Enciende primero la vela negra, luego la blanca.
2. En el papel, escribe el nombre de la persona que deseas alejar de tu casa. Si no sabes su nombre, escribe una descripción clara de ellos. Concentra tu intención en reclamar tu espacio y liberarlo de su influencia.
3. Sostén el papel en tus manos y visualiza a esta persona empacando sus cosas y yéndose pacíficamente. Imagina tu hogar llenándose de luz y tranquilidad a medida que se van. Realmente siente en tu cuerpo la sensación de alivio y libertad.
4. Cuando sientas que has cargado el papel con tu intención, dóblalo alejándolo de ti tres veces. Coloca unas gotas de aceite esencial de limón en el papel doblado, visualizando que estás cortando cualquier lazo negativo entre esta persona y tu hogar.
5. Sostén el papel doblado sobre la vela negra y prende una esquina, permitiendo que se queme por completo en un recipiente seguro. Mientras el papel se quema, repite en voz alta: "Tu energía ya no es bienvenida aquí. Te libero con amor y reclamo mi espacio sagrado ahora".
6. Toma las ramitas de romero y pásalas por el humo de la vela blanca, visualizando que estás infundiendo la planta con energía purificadora. Luego, camina por tu casa con el romero humeante, especialmente alrededor de puertas y ventanas, afirmando en voz alta: "Mi hogar está protegido. Solo el amor y la armonía habitan aquí".
7. Cuando hayas terminado, coloca el romero en tu entrada principal como protección continua. Permite que las velas se consuman por completo de manera segura. Entierra las cenizas del papel fuera de tu casa, liberando completamente la energía. Manteniendo tu espacio sagrado

Después del ritual, es importante continuar afirmando tus límites y protegiendo la energía de tu hogar. Algunas prácticas que pueden ayudar:

• Repite afirmaciones positivas diariamente, como "Mi hogar es un santuario de paz y armonía" o "Establezco límites saludables con amor y respeto".
• Coloca cristales protectores como la turmalina negra o el cuarzo ahumado en las cuatro esquinas de tu casa.
• Quema regularmente hierbas purificadoras como la salvia, el palo santo o el incienso de sándalo.
• Cultiva un ambiente de amor, gratitud y respeto en tu hogar, independientemente de con quién lo compartas.

Recuerda, tú tienes el poder de crear un hogar que te nutra y te apoye. A veces, esto significa soltar a personas o energías que ya no están en alignement con tu mayor bien.

Confiando en la magia de la intención

Querida amiga, espero que este ritual te haya empoderado para reclamar tu espacio sagrado y crear un hogar que realmente te nutra. Recuerda que la magia más poderosa viene de tu propia intención y del amor que tienes por ti misma.

A medida que continúas en tu viaje de crear un hogar armónico, confía en tu intuición y no tengas miedo de establecer los límites necesarios. Tu paz mental y comodidad en tu propio espacio siempre deben ser una prioridad.

Cuéntame, ¿has tenido que lidiar con energías no deseadas en tu hogar antes? ¿Qué prácticas te han ayudado a mantener tu espacio sagrado? Espero con ansias leer sobre tus propias experiencias mágicas en los comentarios.